Cuáles son los efectos económicos
Ganadores y perdedores
Qué puede pasar
La alta participación de la agricultura y los alimentos en la producción total, el consumo, el empleo, el comercio y los ingresos de los Gobiernos aumentará la vulnerabilidad de los países a la volatilidad de los precios internacionales de los alimentos. Del mismo modo sucede con la energía.
Habrá un impacto masivo en los precios de la energía y los alimentos a nivel mundial. Solo en Europa, el gasto en alimentos representa el 15% del índice de los Precios al Consumidor.
Más de un tercio del gasto de consumo de alimentos de los hogares de países de bajo ingreso se destina a alimentos básicos como cereales y verduras.
Muchos destinos de las exportaciones ucranianas de trigo enfrentarán problemas sociales con aumentos de precios.
Problemas de abastecimiento de trigo puede provocar una inestabilidad generalizada, por lo que el actual conflicto podría tener un efecto dominó en todo el mundo de maneras que van más allá de la acción militar.
Los países endeudados enfrentarán serias dificultades para atender sus deudas y mantener un nivel razonable de provisión de bienes y servicios sociales.
En ausencia de arreglos fiscales estabilizadores motorizados por organismos multilaterales, la fuerte dependencia del comercio de alimentos y productos agrícolas puede contribuir a la volatilidad de las finanzas públicas y erosionar la sostenibilidad fiscal.
Los exportadores e intermediarios tendrán ganancias extraordinarias, superiores a las que ya obtuvieron en los últimos dos años con la pandemia a costa del presupuesto de la mayoría de los hogares.
Pueden haber operaciones especulativas, incluso de contrabando de cereales, con su efecto disruptivo social.