Germán Gorráiz López (Aporrea, 8-10-25)
Tras el visto bueno de Trump para que Ucrania pueda atacar territorio ruso utilizando los misiles Tomahawk , «la respuesta de Rusia a la entrega de los misiles Tomahawk estadounidenses a Ucrania podría ser la cooperación militar con Cuba,», declaró Alexander Stepanov, experto militar del Instituto de Derecho y Seguridad Nacional de la RANEPA. – FRW.
El corredor de Suwalki
El corredor de Suwalki, también conocido como el «Gap de Suwalki» o «Suwałki Gap», es una franja estrecha de territorio de aproximadamente 65-100 km de longitud que separa la frontera entre Polonia y Lituania. Esta zona está flanqueada al este por Bielorrusia (aliado de Rusia) y al oeste por el exclave ruso de Kaliningrad, lo que la convierte en un punto estratégico clave para la OTAN.
En un hipotético conflicto entre Rusia/Bielorrusia y la OTAN, el control de este corredor por parte de fuerzas rusas podría aislar a los países bálticos (Lituania, Letonia y Estonia) del resto de la alianza, cortando la única ruta terrestre de refuerzos desde Polonia y Europa occidental lo que facilitaría un puente terrestre entre Kaliningrad y Bielorrusia, fortaleciendo la posición rusa en el Báltico.
La región es escasamente poblada, boscosa, con colinas, lagos y ríos que dificultan avances rápidos de tanques, pero su red vial limitada (principalmente la carretera Via Baltica y una línea férrea) la hace vulnerable a bloqueos rápidos Rusia ha intentado negociar corredores extraterritoriales en el pasado, pero fue rechazado por Polonia, Lituania y la UE y en 2022 se intensificaron las preocupaciones por sanciones que afectaron el tránsito a Kaliningrad.
La OTAN ha reforzado su presencia en la región con batallones multinacionales en Polonia y los Bálticos desde 2017, ejercicios conjuntos polaco-lituano y planes de evacuación civil y Lituania planea mejorar rutas y defensas fronterizas para facilitar el movimiento de tropas pero sigue siendo el «talón de Aquiles» de la OTAN en su flanco este.
Cuba de nuevo protagonista?
Tras el visto bueno de Trump para que Ucrania pueda atacar territorio ruso utilizando los misiles Tomahawk,
Putin ha advertido que ello implicará una «escalada impredecible del conflicto».
Así, según lo expuesto a la agencia de noticias rusa Sputnik por el Jefe del Comité de Defensa de la Cámara Alta del Parlamento Ruso, Víctor Bóndarev «el establecimiento de una base militar rusa en Cuba en un contexto de aumento de las agresiones de EEUU, respondería a los intereses de seguridad Nacional».
Por su parte, Alexander Stepanov, experto militar del Instituto de Derecho y Seguridad Nacional de la RANEPA. – FRW afirmó que «la respuesta de Rusia a la entrega de los misiles Tomahawk estadounidenses a Ucrania podría ser la cooperación militar con Cuba».
Así, podríamos asistir a la firma de un nuevo tratado de colaboración militar ruso-cubana (rememorando el Pacto Secreto firmado en 1.960 en Moscú entre Raúl Castro y Jruschov) cuyo primer hito fue el despliegue en Cuba de un complejo móvil para la recepción de datos de satélites rusos, no siendo descartable la creación de una base de Radares en la abandonada base militar de Lourdes para escuchar cómodamente los susurros de Washington.
Igualmente, Rusia podría responder con el despliegue en Cuba de misiles Iskander M dotados de ojivas polivalentes así como misiles antiaéreos S-400, pudiendo revivirse la Crisis de los Misiles Kennedy-Jruschev (octubre, 1.962) y la posterior firma con Jruschov del Acuerdo de Suspensión de Pruebas Nucleares (1962).